El director general de Evaluación Ambiental del Gobierno de Castilla-La Mancha , Miguel Chillarón, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos de Castilla-La Mancha “para implicarse en las acciones que entre todos podemos realizar de forma individual para ayudar a mitigar el cambio climático realizando un consumo responsable”.
Así lo manifestó durante la conferencia “Consumo responsable como alternativa y lucha frente al Cambio Climático” celebrada en el marco del V Congreso Provincial de Asociaciones de Consumidores y Usuarios que ha tuvo lugar la semana pasada en Las Pedroñeras (Cuenca).
Chillarón indicó que el cambio climático es actualmente una de las principales amenazas para el desarrollo sostenible y que representa uno de los retos ambientales de todos los Gobiernos con efectos sobre la economía global, la salud y el bienestar social.
“La lucha frente al cambio climático, tal y como queda recogida en el Protocolo de Kyoto, implica realizar y poner en marcha políticas y acciones de mitigación, dirigidas a reducir el número de emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, así como políticas y acciones de adaptación, para prevenir los impactos que se producirán”, manifestó.
En este sentido, recordó que la actividad humana genera importantes fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y por todo ello, “el consumidor puede y debe ser responsable analizando sus necesidades, seleccionando el producto o servicio sin comprometer las necesidades de generaciones futuras, informándose de las alternativas existentes en el mercado, haciendo un buen uso del producto adquirido hasta el momento en que deja de ser útil y asegurando una buena gestión del residuo generado”.
De esta forma, insistió en las numerosas medidas que existen dirigidas a promover al ahorro y la eficiencia energética en el hogar como puede ser la compra de electrodomésticos que consuman poca electricidad, instalar bombillas de bajo consumo, ahorrar agua, comprar vehículos de bajas emisiones y practicar una conducción eficiente, etc.
Asimismo expuso propuestas como promover la compra de alimentos locales de temporada, que no han tenido que ser transportados desde lugares lejanos, producidos de forma sostenible (para evitar las emisiones de nitratos y metano), adquirir productos reciclados teniendo en cuenta que al reciclar una tonelada de papel se salvan 17 árboles, reutilizar o utilizar materias primas con certificación ecológica, etc.
El director general explicó finalmente que “el Gobierno de Castilla-La Mancha con un compromiso firme frente a este importante problema ha creado la Oficina de Cambio Climático y la Comisión Regional de Coordinación de Políticas de Cambio Climático, y estamos trabajando en un Pacto social frente al cambio climático porque desde el consenso y con el esfuerzo de toda la sociedad hemos plantar cara a este fenómeno y evitar que la actividad del ser humano deteriore nuestro planeta, a través de una amplia estrategia de acción en materia de mitigación y adaptación”.