La Comisión Europea ha publicado un listado que clasifica a los países según su nivel de riesgo asociado a la deforestación. Esta clasificación distingue entre bajo, normal y alto riesgo. La lista se ha elaborado tomando como base la producción de siete productos considerados claves por el Reglamento de la Unión Europea sobre Deforestación (EUDR): carne de vacuno, cacao, café, aceite de palma, caucho, soja y madera. España se clasifica en nivel de riesgo bajo de deforestación.

Estos productos han sido seleccionados después de realizarse un análisis exhaustivo sobre su impacto, pues representan los principales factores vinculados a la expansión agrícola y, en consecuencia, a la pérdida de bosques. La elaboración de esta lista ha contado con el respaldo unánime de los Estados miembros dentro de la Unión Europea.
Implicaciones para los controles y el comercio
La categorización por niveles de riesgo determina el grado de revisión al que estarán sujetas las importaciones provenientes de cada país. Los productos que se originen en países considerados de bajo riesgo estarán sometidos a una supervisión mínima del 1%, mientras que los de riesgo normal y alto enfrentarán controles del 3% y 9%, respectivamente.
Para los operadores y comerciantes que adquieran bienes procedentes de países de bajo riesgo, las obligaciones en materia de diligencia debida son menos exigentes; se requiere principalmente recopilar información, sin necesidad de evaluar o mitigar los riesgos. Por su parte, los países identificados en la categoría de alto riesgo están sujetos a sanciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas o del Consejo de la UE sobre las importaciones o exportaciones de los productos y materias primas pertinentes.
La puesta en marcha de este proceso pretende garantizar que la aplicación del EUDR sea sencilla, equitativa y eficiente en costos. A la vez, se busca impulsar mejoras en la lucha contra la deforestación, el cambio climático y la reducción de la biodiversidad.
La lista se publica en el contexto previo a la entrada en vigor de la norma, prevista para diciembre de 2025 en las grandes empresas y para el 30 de junio de 2026 para las micro y pequeñas compañías. De manera adicional, la Comisión Europea ha presentado un documento que explica la metodología utilizada para la elaboración de esta evaluación.