La escuela infantil municipal Pere Calafell, situada en la calle Andrade (números 184-196), en el barrio de Sant Martí de Provençals (Barcelona), ya cuenta con una nueva cubierta verde que convierte su azotea en un espacio naturalizado y sostenible. Esta actuación forma parte de la primera fase del Programa de cubiertas verdes en edificios municipales existentes, impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona a través del Institut Municipal del Paisatge Urbà i la Qualitat de Vida.

El Programa de cubiertas verdes en edificios municipales existentes tiene la finalidad principal de transformar las cubiertas de los equipamientos públicos en espacios naturalizados que incrementen la infraestructura verde y la biodiversidad de la ciudad. Se prevé que el programa desarrolle las acciones de implantación de cubiertas verdes establecidas en los siguientes planes estratégicos: Plan Clima, Plan Natura y Plan de Acción por la Emergencia Climática.
Aislamiento térmico del edificio mediante la cubierta verde
La cubierta verde de esta escuela infantil se reparte en dos áreas —una de 207 m² y otra de 460 m²— que han sido acondicionadas con vegetación autóctona y elementos que favorecen la vida silvestre urbana, como un hotel de insectos y un abrevadero, con el fin de atraer insectos polinizadores. Además de su valor ecológico, la instalación contribuye al aislamiento térmico del edificio y a la mejora del entorno urbano.
Este proyecto se suma a la estrategia ‘Bressols pel Clima‘, con la que el Ayuntamiento de Barcelona está naturalizando patios y cubiertas de escuelas infantiles municipales para adaptarlas al cambio climático y crear entornos más saludables para la infancia. Con esta intervención, Barcelona reafirma su compromiso con una ciudad más verde, resiliente y pensada para las generaciones futuras.