Comunicación presentada al VII Congreso Energía Casi Nula
Autora
- Isabel Alonso de Armas, Directora de Alianzas Estratégicas, habitissimo
Resumen
Desde 2013 se ha buscado impulsar la rehabilitación del parque inmobiliario español, sin el éxito esperado. Con un ciudadano cada vez más digitalizado se abren nuevas posibilidades para conocer sus hábitos y comportamiento al realizar intervenciones en su vivienda o edificio, así como para activarle hacia la eficiencia energética y descarbonicación. La revolución digital que se está produciendo no es sólo la aplicación de tecnologías digitales, pues implica un importante cambio cultural, económico y social. Es una disrupción al que ningún ámbito quedará ajeno, siendo necesaria una gran resiliencia, así como supone una gran oportunidad para alcanzar los ODS.
Palabras clave
Rehabilitación, digitalización, reforma, usuario final, eficiencia energética, descarbonización.
Situación de la rehabilitación y reforma
Desde la llamada Ley 3R (Ley 8/2013, de 26 de junio, de Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbanas), se ha tratado de impulsar la rehabilitación de nuestro parque inmobiliario, sin el éxito esperado a pesar de que la normativa, sistemas y soluciones técnicas, así como la financiación han avanzado notablemente para propiciar la eficiencia de nuestros edificios. Si bien la Obra Nueva tomó impulso de recuperación tras la gran caída en la crisis de 2008, la rehabilitación sólo ha experimentado un tímido crecimiento del 6% si se consideran los visados de ampliación y reforma de vivienda en el periodo 2014-2019 del Instituto Nacional de Estadística (INE), siendo plano de 2016-2108, despuntando un 11% en 2019, lo que auguraba buenas perspectivas para el presente año:
El mayor impacto en índices de reducción de demanda energética, emisiones y consumo de energía de origen no renovable, se lograría con la regeneración urbana o la rehabilitación de un edificio, pero la realidad es que la reforma, percibida como la hermana menor de la rehabilitación, mantiene una actividad continua en el tiempo nada desdeñable, estimada en veinticinco o treinta mil millones de euros al año por habitissimo (alineado con valores de asociaciones del sector).
La reforma y otras intervenciones en el hogar pueden ser un primer paso para la ciudadanía para adquirir consciencia del potencial medioambiental de las actuaciones y de sus bondades en términos de salud y bienestar, facilitando la puesta en marcha de la rehabilitación eficiente, con un proceso de toma de decisión y ejecución más lento y complejo. Todas las intervenciones son importantes, todas suman, con independencia de su escala (barrio, agrupación, edificio o vivienda). Quizás por ello el Plan Estatal de Vivienda vigente incluye por primera vez actuaciones en viviendas de un edificio.
Teniendo presente los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la Unión Europea marca el camino, siendo el pasado mes de diciembre cuando presentó el Pacto Verde Europeo (‘The European Green Deal’) como la hoja de ruta para alcanzar una economía sostenible teniendo como pilares el clima y el medioambiente, vinculado a una transición justa. Se plantea la necesidad de poner en marcha una “ola de rehabilitación” ya que los edificios representan el 40 % de la energía consumida, siendo imprescindible mejorar su eficiencia energética, su resiliencia climática, impulsar la digitalización y la economía circular. Teniendo la Ley Europea del Clima como objetivo la neutralidad climática para 2050.
Tras la disrupción de la Covid, el Gobierno ha presentado el pasado 4 de agosto 2020 el Plan de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE) como un plan que se “alinea con las políticas de reactivación económica frente el COVID-19 de la Unión Europea, centradas en la transición energética y la digitalización, generando un efecto incentivador sobre la generación de empleo y actividad económica en el sector de la construcción“ (Nota de Prensa de MITECO, 4 de agosto 2020), destacando la vinculando de la digitalización con el desarrollo del Plan.
Para alcanzar los objetivos marcados, la rehabilitación necesita un motor con triple hélice, que le dé el impulso necesario, siendo cada hélice: políticas de impulso, un usuario final motivado y un sector preparado. La primera hélice, va tomando velocidad e inercia, pues si bien ya se estaba en el camino (Green Deal, PNIEC, ERESEE, etc) la disrupción del virus Covid ha provocado la intención de acelerar la actividad del sector de la construcción (con gran foco en la rehabilitación) para lograr la recuperación económica del país, como el anteriormente mencionado PREE. Sin embargo, no se detecta un cambio sustancial en relación a las otras dos hélices, no se ha encontrado la clave para activar al usuario final, así como el sector sigue adoleciendo de los problemas de estar tan atomizado, como puede ser el retraso en la transformación digital y la falta de relevo generacional (cerca del 50% de profesionales tiene más de 45 años).
La digitalización
La rehabilitación será un pilar europeo para la recuperación, pero ésta sólo será posible con una Sociedad Digital, alcanzando el ámbito de las Administraciones Públicas, las empresas y los ciudadanos. La revolución digital que se está produciendo no es sólo la aplicación de tecnologías digitales, pues implica un importante cambio cultural, económico y social. Es una disrupción al que ningún ámbito quedará ajeno, siendo necesaria una gran resiliencia, así como supone una gran oportunidad para alcanzar los ODS. Las nuevas tecnologías no son un fin en sí mismas, sino que ofrecen nuevos servicios (Internet de las Cosas, Cloud Computing o Big Data) que ayudarán a alcanzar la sostenibilidad. La cifra de viviendas que disponen de acceso a Internet en España se sitúa en torno al 91%.
En el Plan Digital 2025 de la CEOE (Plan Digital 2025 CEOE, 2020, La digitalización de la sociedad española), se identifican cuatro principios básicos para alcanzar una Sociedad Digital, Hiperconectada e Inteligente:
- Todo lo que se pueda digitalizar se digitalizará.
- Todo lo que se pueda automatizar se automatizará.
- Todo lo que se pueda conectar se conectará.
- Todo lo que se pueda analizar se analizará.
Perfil del usuario final
El usuario final es un agente esencial en el proceso de rehabilitación de nuestros edificios, tanto de viviendas colectivas como unifamiliares, pues es quien toma la decisión de iniciar el proceso. En España a partir de 45 años de edad se supera el 80% de hogares con vivienda en propiedad, si bien a partir de los 30 años se supera el 60%. En relación a la pirámide de población de España (INE), la franja de edad más representativa se corresponde con 40-55 años, que sumado a lo anteriormente expuesto hace que los mayores tenedores de primera vivienda tengan la edad entre 45 y 64 años. Correspondiéndose con la Generación X y Baby Boom.
La intervención de rehabilitación y reforma de un inmueble lo afronta normalmente el propietario, y si bien pudiéramos pensar que por la franja de edad del cuadro anterior el peso de la Generación Y o Millenials sería muy significativa en relación a la solicitud en internet de una empresa o profesional, cuyo rango de edad de los usuarios finales que indican solicitar digitalmente (por algún canal) el servicio de un profesional o empresa está situado entre 40 y 59 años, con gran peso de la Generación X (1969-1980). (Informe de evolución de la Reforma de habitissimo, julio 2020)
Las búsquedas realizadas en internet ayudan a entender las preocupaciones de los ciudadanos y según un estudio realizado por Google (Infografía Google Internal Data, 2020, Estudio Sostenibilidad energética: El usuario comprometido y la industria), el 80% declara estar interesado por el medioambiente y la sostenibilidad, así como el 78% considera importante o muy importante tomar medidas contra el cambio climático. Si bien no se aprecia gran difencia de respuesta en cuestión de género, en relación a las edades, se muestra más concienciación entre las edades 35 a 54 años. Siendo interesante el dato de que la audiencia preocupada en el medioambiente está muy interesada en su hogar (decoración, diseño y mantenimiento) usando revistas y webs relacionadas para informarse.
Según habitissimo en 2019 (Informe de la Reforma y Reparación 2019 de habitissimo, 2020) el perfil del usuario final que solicitó de forma digital el servicio de un profesional fue mujer entre 51-55 años:
Si en base a esta información disponible en internet, se extrae el rango de edad en tramificación de 5 años, sería 50 a 55 años el grupo de edad objetivo, por encontrarse situado entre los mayores tenedores de vivienda en propiedad, mostrar mayor preocupación por el medioambiente, así como indicar que usan medios digitales para la búsqueda del servicio de mejora de su vivienda.
Posibilidades de la digitalización para activar al usuario final
Para impulsar la rehabilitación y reforma eficiente, se debe lograr que el ciudadano, en función de la fase en la que se encuentre adquiera consciencia de:
- los objetivos sostenibles como sociedad
- su situación actual
- la potencialidad de las intervenciones que como individuo o comunidad realice, en base a ahorro, confort, salud
- planteamiento y ejecución de las intervenciones, ya sean medidas pasivas o activas
- valor del impacto obtenido
- autodifusión de los beneficios logrados pues el impacto logrado sobre otros usuarios será muy relevante
Las búsquedas realizadas en internet ayudan a entender las preocupaciones de los ciudadanos, habiendo aumentado un 135% el interés por el medioambiente y la lucha contra el cambio climático (Infografía Google Internal Data, 2020, Estudio Sostenibilidad energética: El usuario comprometido y la industria), sin embargo a la hora de realizar intervenciones del hogar si se analizan las búsquedas realizadas en Google en el último año, se puede ver una clara diferencia entre las intervenciones habituales realizadas (pintura, cocina) y las que están más vinculadas con las energías renovables (autoconsumo, placas solares) o con la eficiencia energética (ventana).
Siendo por los usuarios finales la estancia más elegida para reformar el baño (51%), seguida de la cocina (40%). (Informe de la Reforma y Reparación 2019 de habitissimo, 2020)
Internet y las redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram, etc.) son hoy en día un espacio en donde los usuarios se informan y donde poder impactar en el público objetivo, tal y como realizan las grandes marcas de productos en sus campañas, para lograr que de la concienciación se llegue a la acción para alcanzar la mitigación del cambio climático.
Control del consumo
El acceso de forma casi instantánea al consumo energético o agua facilita la percepción del usuario final del retorno en ahorro de acciones implementadas de una forma clara y rápida. Como ejemplo de herramientas digitales útiles, se presenta la aplicación de móvil de Iberdrola, a través de la cual su cliente puede conocer en detalle del consumo energético del mes en curso, de los últimos años, meses, días, incluso por horas. También puede realizar la modificación de la potencia contratada o controlar dispositivos inteligentes que disponga en su vivienda. (Aplicación Iberdrola 2020 [app para móvil])
Entre las intervenciones subvencionables incluidas en el Plan de Rehabilitación Energética de Edificios (PREE) para la mejora de la eficiencia energética se incluyen sistemas de domótica, sistemas de monitorización y otros sistemas digitales que permitan una mejor gestión y la reducción del consumo energético del edificio.
Reducción de incertidumbre al emprender intervenciones
Para una persona que va a realizar una rehabilitación de su vivienda unifamiliar o edificio colectivo, así como una reforma integral, suele ser su segunda mayor inversión económica (la primera, la adquisición de la vivienda) y lo afrontará una o pocas veces en su vida. Esto hace que se encuentre ante una situación nueva, con múltiples interlocutores, lo que provoca un alto grado de incertidumbre. La digitalización puede también ayudar a mitigar dichos miedos, entre ellos, la falta de confianza.
Internet se ha convertido en el medio preferido por los consumidores (93%) para buscar información, por delante de la televisión (90%), las redes sociales (78%) y la radio (72%), seguida de la prensa (68%) (KPMG, 2018, Informe Me, my life, my wallet). No siendo diferente su comportamiento en relación a las intervenciones en la vivienda o edificio, obtención de información sobre ayudas disponibles o qué empresa le da más confianza. Visitando la web de la empresa que vaya a realizar la obra, así como publicaciones en medios de terceros, o plataformas de servicios (housfy, habitissimo, etc.) donde se produzca el reconocimiento de su profesionalidad, al estilo de Tripadvisor.
Realidad aumentada (RA) y realidad virtual (RV)
La realidad aumentada (RA) y la realidad virtual (RV) se están desarrollando y se prevé una gran presencia generalizada con la implantación de la red 5G, y por ello empresas como Facebook trabajan en su nuevo mundo de realidad virtual (Facebook Horizon), considerando que la sociedad está preparada para ello. Representa una gran oportunidad para la rehabilitación al poder mostrar al usuario final el estado final de la actuación.
Building Information Modeling (BIM)
Permite la integración de todos los agentes intervinientes durante el ciclo de vida del edificio, mejorando, entre otros aspectos la eficiencia de gestión del inmueble y el uso de recursos.
Hogar Digital
Los hogares tienden rápidamente a digitalizarse, a incorporar dispositivos inteligentes como las smart TV, los altavoces inteligentes que se conectan con otros dispositivos de la vivienda, las luces inteligentes, radiadores con wifi, persianas inteligentes, etc., todo conectado, son ya de gran ayuda y una gran oportunidad para aumentar nuestra eficiencia energética acompañada del confort.
El uso del Internet de las cosas (IoT), Inteligencia Artificial (IA), utilización de Big Data, servicios en la nube, etc. seguirán marcando el camino de la transformación digital.
El papel de la administración pública
A parte del impulso al proceso general de digitalización de la sociedad será importante seguir trabajando en el desarrollo de Open Data para favorecer la reutilización de la información del sector público.
La digitalización de gestiones con la administración tanto en acceso electrónico a ayudas públicas (información, solicitud, seguimiento, etc.) como con las solicitudes de licencias agilizaría y simplificaría los pasos a seguir del usuario final, comunidad de propietarios u otro agente.
La digitalización propicia, entre otras acciones, la creación por la administración de oficinas virtuales para el asesoramiento en rehabilitación energética que ayudan a difundir las bondades de la rehabilitación, así como a la efectividad de los planes de subvenciones puestos en marcha.
Conclusión: el sector deberá aprovechar dichas herramientas para ‘activar’ al usuario final
La transformación digital no afecta sólo al usuario final, es una transformación 360º de la sociedad española, a la que el sector no puede darle la espalda ni dilatarlo, o pensar que se reduce sólo a implantar la metodología de BIM.
Cada vez el usuario final está más digitalizado en otros ámbitos de su vida (trabajo, salud, ocio) y va a requerir para sus intervenciones de rehabilitación o reforma un interlocutor con quien pueda “entenderse” y que le ofrezca la confianza necesaria en línea a cómo la adquiere en otras tomas de decisión (compras con Amazon, restaurantes en Tripadvisor, etc.) como, por ejemplo, en base a acreditaciones profesionales, opiniones de clientes o imágenes de proyectos realizados. Para las empresas será esencial tener presencia digital y cuidar su reputación online.
Conocer sus hábitos, motivaciones y expectativas será importante para lograr activar al usuario final en su papel privado o como comunidad de propietarios hacia la rehabilitación con foco en la eficiencia energética.
El uso de herramientas digitales será y es ya esencial para animar y lograr que las intervenciones se dirijan a cumplir los objetivos de descarbonización y eficiencia energética del parque inmobiliario, convirtiéndose el interlocutor del usuario final, ya sea el técnico o el responsable de la ejecución de la obra, en un guía y promotor de soluciones orientadas a tal fin.
Distintas herramientas digitales permitirán al sector poder seguir identificando parámetros y su evolución en el tiempo, así como el impacto de acciones provocadas o acontecidas, como pueden ser los efectos sobrevenidos por los meses de confinamiento en nuestros hogares, planes de ayudas o campañas de difusión.