El Gobierno de Canarias ha finalizado las obras de rehabilitación energética de dos edificios residenciales en la isla de Tenerife, que suman un total de 110 viviendas protegidas. Esta actuación ha sido llevada a cabo por la empresa pública Visocan, con financiación de fondos Next Generation de la UE, para la mejora de dos edificios de 80 viviendas, en Santa Cruz de Tenerife, y de 30 en Adeje. La actuación ha supuesto una inversión global de más de 3,2 millones de euros.
Con motivo de la finalización de las obras, el consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad, Pablo Rodríguez ha visitado el edificio de La Gallega acompañado por el director del Instituto Canario de la Vivienda (Icavi), Antonio Ortega; el gerente de Visocan, Javier Terán; el director técnico de Visocan, Ignacio García, y la concejala delegada de Vivienda de Santa Cruz de Tenerife, Ana Belén Mesa.
Actuaciones de rehabilitación para reducir el consumo energético
Los trabajos realizados han permitido que el edificio de La Gallega pase de una calificación energética G a B, y el de Armeñime de G a D. El consumo medio anual de energía se ha reducido en un 89,6% y 73,8% respectivamente, lo que supone un ahorro significativo en kWh/m².
Las actuaciones han incluido la mejora de la envolvente térmica mediante aislamiento en fachadas y cubiertas, sustitución de carpinterías exteriores por ventanas con doble acristalamiento y persianas, e instalación de paneles solares individuales para la producción de agua caliente sanitaria. Además, se han incorporado sistemas de energía fotovoltaica para el abastecimiento eléctrico de las zonas comunes.
Visocan ya ha redactado dos nuevos proyectos similares que están pendientes de ejecución: uno en Garachico, en la isla de Tenerife, para 60 viviendas y otro en Santa Lucía de Tirajana, en Gran Canaria, para 36. Con ello, el Gobierno de Canarias sigue avanzando hacia un parque público de vivienda más moderno, eficiente y adaptado a los retos climáticos y sociales actuales.