Edificio ATRIO

El edificio ATRIO, sede social de la Empresa Municipal de la Vivienda de Rivas-Vaciamadrid, es obra de los Arquitectos Bibiana Ulanosky y Norberto Beirak. El proyecto del mismo fue seleccionado en una convocatoria publica por el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE ) y el Instituto de Comercio Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores (ICEX) para formar parte de la representación española en el Congreso Sustainable Building 2008 en Melbourne, Australia en el proyecto “Green Architecture. 16 contemporary projects. Spain", Septiembre 2008.

La Empresa Municipal de la Vivienda de Rivas Vaciamadrid (Madrid), organismo autónomo del Ayuntamiento de dicha localidad, tiene como cometido central la gestión, construcción, promoción o rehabilitación de viviendas, dedicando una especial atención a la vivienda de protección pública, así como al asesoramiento a los ciudadanos en materia de vivienda.

El programa demandado por el cliente para la realización del proyecto del edificio, incluía oficinas de libre distribución, archivos, aparcamientos, salón de actos y zonas complementarias, debiendo contar con amplio espacio de atención al público.

La característica más destacable del edificio es su fachada de muro cortina con vidrios de colores definidos según un criterio pictórico de semblanza con el atardecer madrileño; y por sus lamas de protección solar en fachada y cubierta en constante movimiento al estar gestionadas mediante un sistema de control programado informáticamente.

Pero además, el Edificio Atrio cumple una función destacada como articulador urbano. Está situado en la Avenida de José Hierro frente a una glorieta y atravesado por el eje paisajístico que compone un parque bulevar con prolongación visual hacia las cumbres distantes en la orilla del Arroyo de los Migueles; y forma parte de la secuencia de equipamientos situados a lo largo de la Avenida, vía tangencial de interconexión urbana. Frente al edificio se desarrolla un espacio a modo de plaza como transición entre el exterior y el interior y área de estancia y espera: a tal fin la fachada del edificio se quiebra para así aumentar la superficie exterior e invitar al acceso al peatón.

Es un edificio de tres plantas sobre rasante, compuesto por dos cuerpos paralelos destinados a oficinas y uso comercial en planta baja, separados por un atrio de triple altura dotado de iluminación cenital y frontal. Los cuerpos contienen sendos núcleos destinados a circulaciones verticales, aseos, locales de servicio y canalización de instalaciones, siendo el resto de su superficie de libre disposición; y están comunicados por pasarelas abiertas en cada nivel. Se consigue con esta configuración el máximo aprovechamiento de luz natural en oficinas, con una profundidad máxima de 7.50 m para los puestos de trabajo.

El bulevar encuentra su prolongación visual en el interior del edificio a través del atrio, que permite la transparencia visual hacia el paisaje. El atrio es el corazón espacial, funcional y ambiental del edificio: control de accesos y área de circulación y estancia; se desarrolla en dos niveles: el de acceso general al edificio en planta baja, y en el primer nivel bajo rasante como sala de exposiciones y foyer del salón de actos.

Bajo rasante se encuentran también zonas de archivo, espacio para local comercial, garaje cubierto y cuartos de instalaciones. El acusado desnivel del solar permite el fácil acceso desde el acceso posterior rodado a la planta -1 del edificio a través del aparcamiento exterior.

 

Las plantas de oficinas se proyectan diáfanas según un módulo de 2.50 m, con aventanamientos corridos a fin de permitir la subdivisión en espacios de dimensión variable, salas de reunión, despachos celulares u oficinas paisaje. Los dispositivos de cerramiento, acondicionamiento de aire, ventilación, iluminación y otros se han diseñado atendiendo a la posibilidad de personalizar su uso siempre que esto fue posible.

Criterios de Sostenibilidad

La idea del edificio se ha desarrollado según los siguientes criterios de sostenibilidad:

La aplicación de estas estrategias ha permitido un sustancial ahorro energético, aproximadamente una 30% del gasto total.

La piel inteligente: Fachada Ventilada

La piel del edificio se ejecuto mediante muro cortina de aluminio que resuelve la totalidad de las fachadas y los diferentes requerimientos con planos continuos y una misma modulación de énfasis horizontal. Para la elección de los colores se trabajo con carta Pantone y tratamiento de tipo pictórico. Las zonas opacas se componen de trasdos de ladrillo de ½ pie directamente apoyado en el forjado; aislamiento proyectado exteriormente ignifugo de color gris y estructura metálica sujeta al trasdos que recibe piezas de vidrio templado. Una cámara de aire vertical y continua que impide el paso de la humedad desde el exterior al interior por lo que su funcionamiento es el de una fachada ventilada.

El principio de funcionamiento de la fachada ventilada esta basado en el hecho de que al calentar el sol la hoja exterior, el aire de la cámara se calienta y tiende a subir, generando una corriente vertical que impide el aumento de la Temperatura en el interior de la edificación. Esto provoca el consiguiente ahorro energético en los meses calidos y evita condensaciones, al evacuar el vapor de agua proveniente tanto del interior como del exterior del edificio. Durante los meses fríos, este funcionamiento se alterna con la reducción de pérdida de calor, debido a que el aislamiento térmico esta colocado en toda la superficie de la fachada, evitando que se produzcan puentes térmicos, y funcionando como un acumulador de calor.

El atrio como recurso bioclimático

El atrio es corazón espacial, funcional y ambiental del edificio. Permite lograr la iluminación natural de una parte de las oficinas, se convierte en centro de circulación y estancia informal. El espacio de atrio sirve como amortiguador térmico y acústico entre el exterior y el interior, y actúa como recurso bioclimático.

Tiene dos niveles de uso: el de acceso al edificio y en el primer nivel bajo rasante como vestíbulo del salón de actos. Los puentes de unión de los cuerpos del edificio actúan como balcones hacia el mismo. Su cubierta es acristalada, con vidrios aislantes de seguridad y baja emisividad y lamas exteriores motorizadas de control solar regulables. De este modo en invierno podrá funcionar como invernadero acumulando calor para su propia calefacción. En verano las lamas exteriores protegerán la cubierta del soleamiento, garantizando el confort que brinda el sombreado.

Materiales

Los materiales utilizados se seleccionaron con criterios de sostenibilidad en relación a su reciclaje y no contaminación y a favorecer un ámbito de trabajo más saludable por el control de la absorción acústica y la electricidad estática.

Los suelos técnicos tiene núcleo de sulfato calcico (anhidrita inerte), material totalmente reciclable, material altamente ignifugo con propiedades hidrófugas y contra la electricidad estática. El material del falso techo se selecciono según criterios de absorción acústica y alta luminosidad para favorecer las condiciones de trabajo La absorción acústica del techo propone un coeficiente Apha w 0,70h, una atenuación lateral de 37db. El coeficiente de reflexión de la luz será superior a 88%.

El material de suelos y paredes interiores del atrio se ejecuto con tablero laminado realizado con fibras de madrea 100% natural con la cara superficial impregnada en resinas termo endurecidas, con alta resistencia al impacto, a los agentes químicos y disolventes orgánicos, resistencia al fuego M1 y baja emisión de gas y humos nocivos sin goteo en caso de combustión.

Vidrios y lamas de protección solar

La hoja exterior de la fachada ventilada esta formada por una perfilería de aluminio que sostiene paneles de 2,50 x 0,75m de un vidrio templado extraclaro de 6 mm, esmaltado por su cara posterior a 800 grados. Este proceso vitrifica los esmaltes y los hace inalterables al paso del tiempo y la incidencia solar. Los paneles se apoyan en perfiles horizontales y se unen verticalmente a hueso. La elección de esta técnica se basa en la conveniencia de emplear vidrios templados que resisten a temperaturas de soleamiento directo, elevadas incluso cuando el tintado se realiza con colores oscuros y son mas seguros en caso de fallos, si como aligerar las cargas sobre la estructura de aluminio.

Los vidrios extractaros tiene bajo contenido en hierro, lo que les otorga propiedades de transparencia excepcionales. El templado del vidrio permite que resista cambios bruscos de temperatura, hasta 200 Cº, comparado con el vidrio estándar que es de 40Cº. También se seleccionó esta técnica por su grado de seguridad, en caso de rotura se rompe en porciones muy pequeñas lo que minimiza el riesgo de heridas en los posibles viandantes. La pintura se aplica antes del templado del vidrio por lo que la pintura se funde con la masa del vidrio. Las zonas transparentes de la fachada tiene estructura fijada a los cantos de forjado y tiene huecos practicables y acristalamiento aislante. Las fachadas orientadas a E, S y O están provistas de lamas de control solara motorizadas y controladas domoticamente a través de sensores a fin de asegurar la mayor luminosidad natural y evitar la incidencia directa de los rayos solares en las zonas de trabajo. Cuando se carece de lamas de protección se emplean vidrios inteligentes bajo emisivos.

Luz y Ventilación Natural

Las plantas de oficinas se proyectan diáfanas con una profundidad máxima de 7,50m para los puestos de trabajo logrando un máximo aprovechamientos de luz natural. La fachada según un modulo de 2,50m con ventanas corridas a fin de permitir la subdivisión en espacios de dimensión variable, salas de reunión, despachos celulares u oficina paisaje.

El modulo de 2,5m tiene incorporado una ventana batiente a fin de permitir la ventilación natural de la oficina.

Instalaciones

El edificio cuenta con climatización frío-calor por expresa solicitud de la propiedad a fin de garantizar el cumplimiento del acuerdo sindical que establece una Temperatura máxima de 25º en verano, las medidas adoptadas en la construcción del edificio favorecen una reducción del gasto energético en un 30% debido al uso de la fachada ventilada, el aprovechamiento de la luz y ventilación natural.

Se utilizan sensores de presencia en aseos y oficinas, y la domotización de las instalaciones permite el control centralizado para facilitar y agilizar la gestión desde puesto remoto. El sistema de domotización se centra en el control del alumbrado, la climatización, la detección contra incendios y las alarmas contra intrusión.

Instalación fotovoltaica conectada a la Red

La instalación fotovoltaica genera electricidad que se inyecta en la red, las instalaciones de venta a red funcionan automáticamente en paralelo con la red eléctrica convencional. Se han instalado 180 módulos fabricados con células de silicio de 140 wp con una potencia pico del campo fotovoltaico de 25.200wp. Los 180 módulos se conectan entre si formando 18 grupos en paralelo de 10 módulos en serie para conseguir la tensión de trabajo del inversor.

Los 32.769 KWh/año producidos suponen unos ingresos orientativos de unos 14.500 €.

 
 
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