“Nuestro objetivo de reducir las emisiones a la atmósfera abarca todas nuestras operaciones y productos, al tiempo que pretende generar una mayor conciencia sobre el papel de nuestros electrodomésticos eficientes”, afirma el presidente y CEO de Electrolux, Hans Str?berg. “Todo ello se integra en el modo de orientar nuestro negocio, desde las decisiones que tomamos en los Consejos de Administración hasta las actividades de nuestro personal en oficinas, fábricas y almacenes de todo el mundo”.
Según Hans Str?berg, “Electrolux debe desempeñar un papel fundamental en el reto de preservar los recursos naturales. Más aún, estamos creando oportunidades para hacer crecer nuestra actividad y racionalizar nuestras operaciones”.
“Reducir el consumo de energía en las operaciones es una parte esencial de nuestro propósito de contrarrestar el cambio climático. Con el lanzamiento del programa ‘Green Spirit’, Electrolux estableció sus primeros objetivos en cuanto a reducción de consumo de energía”, subraya el presidente.
“El objetivo establecido en 2005 – continúa – era reducir en un plazo de cuatro años el consumo de energía, y por tanto el nivel de emisiones, en un 15%. Confiados en poder alcanzar esa cifra para finales del presente año, la dirección del Grupo ha aprobado nuevos objetivos en la reducción de consumo de energía”.
Costes y ahorro de CO2
“Hemos logrado reducir nuestros consumos de energía en un 14,5% a escala global, gracias sobre todo a las iniciativas desarrolladas en las plantas de producción”, asegura Tomas Dahlman, director global de Estrategias Energéticas. “Esto ha propiciado el ahorro de 90.000 toneladas de CO2, equivalente a las emisiones producidas por 40.000 coches en un año”.
Al trabajar con estos objetivos, Electrolux es menos vulnerable a las fluctuaciones en los precios de la energía. El Grupo ha ahorrado alrededor de 115 millones de coronas suecas (10,4 millones de euros), una cantidad que habría sido destinada al consumo de energía.
A medida que la compañía inicia una nueva etapa del programa ‘Green Spirit’, ya está fijándose un objetivo ambicioso para los próximos tres años: un 15% menos de consumo de energía para 2012.
“Es un objetivo muy exigente pero creo que, con el compromiso de todos, podemos lograrlo”, concluye Dahlman.