La reconversión de una nave de Barcelona ofrece 46 viviendas con materiales sostenibles y certificación energética A

La nave industrial de la Fabra i Coats en Barcelona

La antigua nave industrial de la Fabra i Coats en Barcelona ha sido reconvertida en un edificio de 46 viviendas manteniendo la estructura original de principios del siglo XX y utilizando sistemas de construcción sostenibles.

La nave industrial de la Fabra i Coats en Barcelona se transforma en un bloque de viviendas para jóvenes y artistas.

El edificio está ubicado en el barrio de Sant Andreu de Palomar, y es la primera promoción del Ayuntamiento de Barcelona destinada especialmente a jóvenes desde hace más de una década.

Consta de 41 viviendas para jóvenes de entre 18 y 35 años, y 5 viviendas que se han entregado al Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB), que las gestionará como residencias de artistas que trabajan en las fábricas de creación y hacen estancias en la ciudad a través de intercambios.

El precio de la obra ha sido de 6,3 millones de euros más IVA. Las llaves fueron entregadas el pasado mes de diciembre.

Materiales reciclables y de bajo coste energético

En cuanto a la construcción, se han seguido criterios sostenibles. Se trata del primer edificio de vivienda de alquiler público que se edifica en el interior de una nave industrial, y se ha aprovechado y conservado la estructura exterior de la fábrica. Se ha realizado mediante un sistema denominado construcción dentro de construcción, que separa la estructura interior de las fachadas exteriores y que aprovecha al cien por cien la capacidad de la estructura original.

Esta estructura interior es prácticamente toda de madera, un material con un impacto ambiental muy bajo. Todos los materiales que se han utilizado son reciclados, reciclables y de bajo coste energético.

Interior de la nave industrial reconvertida en un edificio de viviendas.

Además, todos los pisos tienen un certificado energético A gracias a un sistema de aerotermia de alta eficiencia, protección solar y ventilación cruzada.

En total, son 44 viviendas de dos dormitorios y dos viviendas adaptadas de un dormitorio. Todas tienen una superficie media de 64 m2. El nuevo edificio dispone de grandes espacios comunes que los jóvenes podrán utilizar y compartir según sus necesidades. El uso de los espacios se decidirá mediante un proceso participativo a través del Instituto Municipal de la Vivienda y Rehabilitación (IMHAB), que empezará a principios de este año.

 
 
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