Recientemente se han puesto en marcha dos instalaciones de refrigeración solar en la Comarca de Doñana, situadas en el Camping Dehesa Nueva de Aznalcázar (Sevilla) y en la Oficina de Turismo del Parque Dunar de Doñana, en Matalascañas (Huelva).
Para Miguel González, director gerente de la Fundación Doñana 21, entidad que ha promovido esta ubicación en la Comarca de Doñana, “estas iniciativas suponen un compromiso energético sostenible de un territorio ya de por sí comprometido con el desarrollo sostenible, y que aspira a convertirse igualmente en referente en cuestiones como las energías renovables y el ahorro energético”.
Por su parte, la directora del Departamento Solar del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), Amparo Fresneda, ha destacado la idoneidad de los emplazamientos en Doñana, y de las 10 instalaciones que en total se están implantando en Andalucía, ya que la climatología del lugar permite obtener el máximo rendimiento de esta tecnología. Además, ha añadido que “junto con las instalaciones andaluzas y las que se pondrán en marcha en Murcia y Cataluña próximamente, podremos obtener datos para evaluar la aportación de la energía solar en el panorama energético nacional”.
Por otro lado, las propias instalaciones van a servir como elemento sensibilizador sobre las energías renovables, además de formar parte del recorrido interpretativo del Camping Dehesa Nueva y la Oficina de Turismo de Matalascañas, incluida en la oferta del Parque Dunar.
Precisamente, en el caso de la puesta en marcha en Matalascañas, tanto la delegada de onubense de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, María José Rodríguez, como la diputada del Área de Energías Renovables de la Diputación de Huelva, Mª José Cortil, han destacado que el Parque Dunar constituye con esta nueva instalación tecnológica un espacio único en la comarca en el que confluyen oferta de ocio y cultura, turismo sostenible, estudios científicos y además, la última tecnología en energías renovables. Una tecnología que además supone el suministro de una energía tan limpia como la proveniente del sol, sin coste ambiental de ningún tipo, hablando tanto de la refrigeración solar como del Bosque Solar que también se ubica en el Parque Dunar, junto al Museo del Museo Marítimo
Según las explicaciones sobre el terreno de los técnicos de Gamesa Solar, empresa encargada de las instalaciones (obras y canalizaciones) en Aznalcázar y Matalascañas, la tecnología empleada es puntera, ya que únicamente esta empresa facilita la ‘telemonitorización’ de estos servicios, es decir, posibilita poder controlar en todo momento las instalaciones y su funcionamiento a través de Internet. En este sentido, muy pronto, cualquier usuario de internet podrá acceder en tiempo real a la gráfica de las instalaciones y comprobar los parámetros de funcionamiento de las dos instalaciones, a través de la web.
Por su parte, Rotartica es la empresa que ha ejecutado el transformador térmico, que a través de absorción y a partir de las placas solares posibilita la refrigeración, además de la calefacción y el agua caliente que de por sí generan las placas.
El funcionamiento es sencillo, si los aparatos de aire acondicionado convencionales requieren un compresor para producir frío, lo cual supone un gasto energético que implica un aumento económico en la factura de consumo eléctrico durante los meses de calor, en este caso, la refrigeración solar produce frío mediante una máquina de absorción que se alimenta con agua calentada a través de las placas solares.
Estas instalaciones de refrigeración solar suponen un ahorro aproximado del 70% en la factura eléctrica, además de evitar la emisión de más de 8 toneladas de CO2 a la atmosfera en términos de coste ambiental, o 3,12 TEP (Toneladas Equivalentes de Petróleo) de energía primaria al año, si hablamos de coste energético.
Estas instalaciones de refrigeración solar se enmarcan en un conjunto de actuaciones incluidas en el Plan de Energías Renovables (PER) 2005-2010, impulsado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE), y más concretamente, dentro del convenio de colaboración entre IDAE, Agencia Andaluza de la Energía y Rotartica. La Fundación Doñana 21 ha sido la entidad que ha promovido que dos de estas instalaciones estén ubicadas en la Comarca de Doñana.