El Ayuntamiento de Villajoyosa (Alicante) ha convocado una línea de ayudas para la rehabilitación y conservación de viviendas que superan los 50 años de antigüedad. La dotación económica total que se distribuirá entre los solicitantes es de 250.000 euros. El plazo de solicitud está abierto hasta el 12 de agosto.
La convocatoria permitirá subvencionar las Inspecciones Técnicas de Edificios (ITE) y las obras de rehabilitación relacionadas con ellas. Estas inspecciones son obligatorias para los propietarios y se hacen muy necesarias, ya que más del 52% de las edificaciones de Villajoyosa superan los 50 años, por lo que requieren evaluaciones periódicas y, con frecuencia, obras de conservación.
Obras de conservación y rehabilitación
Estas subvenciones financian la elaboración del Informe de la Inspección Técnica de Edificios, un trámite obligatorio cada cinco años para inmuebles de más de 50 años de antigüedad, según recoge la Ordenanza Municipal Reguladora de la Conservación y de la Inspección Técnica de Edificios, aprobada en marzo de 2020; y las obras de conservación y mejora que la ITE recomiende (100% del coste de la ITE y hasta el 50% de las obras, con topes por intervención).
La presentación de estas ayudas será exclusivamente telemática y la documentación a presentar es el modelo oficial que se puede encontrar en la sede electrónica municipal. Las solicitudes que se presenten serán valoradas según criterios objetivos como la antigüedad del edificio, la necesidad de intervención y viabilidad técnica, entre otros.
Inspección Técnica de Edificios
Pasar la ITE cada cinco años es obligatorio, y su incumplimiento puede conllevar sanciones. Tener estos trámites al día es indispensable para evitar incidentes graves como la aparición de grietas o el desplome de viviendas en las que los propietarios hayan obviado el deber de mantenimiento de sus propiedades. Con estas ayudas, el Ayuntamiento de Villajoyosa anticipa actuaciones preventivas, consolidación de estructuras, reparación de fachadas y mejora de elementos comunes para evitar emergencias y reforzar la seguridad de todo el parque residencial.
En caso de que la Administración tuviera que actuar, sería a través de la Ejecución subsidiaria de la inspección u obras, cuyos costes recaerán en los propietarios, que tienen la responsabilidad civil y penal en caso de daños o accidentes, incluso puede llegar el caso a aplicar recargos en el IBI y pérdida de acceso a futuras ayudas públicas.