El proyecto Circom, iniciado en 2022, se encuentra ya en su fase final con la validación en demostradores de los estudios realizados por el consorcio. Se centra en alcanzar la economía circular en la construcción y la metalurgia mediante la activación alcalina, desarrollando materiales sostenibles a partir de residuos industriales y soluciones libres de cemento con alto rendimiento mecánico y térmico.
Circom ha abordado una doble necesidad medioambiental en dos industrias de gran impacto, la construcción y la metalurgia, que generan de manera inherente a sus procesos productivos una elevada cantidad de residuos. A lo largo de su desarrollo, el proyecto ha trabajado en la obtención de nuevos materiales cementantes a partir de escorias siderúrgicas y de residuos de construcción y demolición (RCD), empleando la tecnología de activación alcalina. Gracias a ello, estas industrias pueden valorizar sus residuos y transformarlos en materias primas sostenibles.
Nuevos materiales reciclados validados en entornos industriales
Tras la validación en una serie de pruebas de laboratorio, los miembros del consorcio de Circom llevaron a cabo diversos desarrollos. Por parte del Centro Tecnológico AIMEN, en colaboración con el Centro de Investigación Metalúrgica AZTERLAN y Reinosa Forging Castings (RFC), se creó un material libre de cemento y resinas para moldes de fundición, basado en un sistema ligante-arena fabricado íntegramente a partir de la recuperación y acondicionamiento de escorias negras. Además, AIMEN, en colaboración con RFC, diseñó un hormigón refractario sin cemento, con elevada resistencia mecánica y térmica, obtenido mediante la activación alcalina de escorias negras.
Por parte del Instituto de Tecnología Cerámica (ITC), en colaboración con Cantera-La Torreta, se desarrolló un material de construcción sostenible basado en la valorización de RCD, a partir de un procedimiento optimizado de activación alcalina sobre las fracciones útiles de este residuo.
Actualmente, Circom ha desarrollado demostradores a escala real en entornos industrializados. En RFC se han elaborado moldes de fundición con materiales aglutinantes alternativos, validados en condiciones de uso real. Por su parte, de la mano del ITC, en Cantera-La Torreta se han fabricado ladrillos para obra y capas para firmes de carretera (suelocemento) basados en material reciclado, con una huella de carbono inferior al cemento Portland convencional y sin disminución de sus propiedades mecánicas y funcionales.
Estos resultados representan un paso decisivo hacia la aplicación industrial de los materiales desarrollados, consolidando al proyecto Circom como una referencia en la generación de soluciones constructivas sostenibles que combinan alto rendimiento técnico y respeto ambiental mediante la valorización de residuos industriales.
El proyecto está financiado con fondos de la convocatoria de Colaboración Público Privada 2021 con una duración prevista de 36 meses y con un presupuesto total de 980.930,02 euros.
