Se instalan 223 m2 de placas solares en el Hospital de Fuenlabrada (Madrid) que calentarán diariamente 16.000 litros de agua.

La iniciativa se enmarca dentro del plan de actuaciones en materia medioambiental que ha desarrollado este centro sanitario desde el inicio de su actividad asistencial, con el objetivo de minimizar el impacto tanto de los recursos que el hospital consume para su abastecimiento y funcionamiento, como los derivados de su propia actividad en forma de residuos, vertidos y emisiones

La Comunidad de Madrid, comprometida con la sostenibilidad medio ambiental, favorece la adopción de medidas orientadas al uso adecuado de los recursos disponibles en sus diferentes centros sanitarios. En esa línea el Hospital de Fuenlabrada tiene integrado, desde el inicio de su actividad, la gestión de los residuos en un proyecto global de actuaciones en materia medioambiental.

"Un hospital debido a su complejidad funcional consume una gran cantidad de recursos naturales, produce residuos, se vierten aguas residuales y se emiten ruidos y gases contaminantes a la atmósfera", según ha explicado la responsable del area de Ingeniería y Servicio Técnico del hospital, Ana Cabrero.

Dado que los problemas medioambientales afectan directamente a la salud y calidad de vida de la población, este centro sanitario, se ha planteado hacer compatible la actividad desarrollada con la preservación medioambiental de manera activa.

Para ello ha desarrollado un proyecto de sostenibilidad que comprende la gestión de residuos, consumos energéticos, vertidos, emisiones ambientales etc. con la finalidad de minimizar el impacto tanto en los recursos que el hospital necesita para su funcionamiento (abastecimientos y mantenimiento en general) como en lo que se deriva de su actividad (residuos, vertidos y emisiones).

Gestión de residuos

El proyecto de sostenibilidad del hospital Universitario de Fuenlabrada afecta a muchas áreas por lo que la gestión correcta de los residuos tiene un fuerte peso especifico en la organización. La primera medida que se adoptó fue la constitución de un Comité encargado de definir las estrategias orientadas a realizar una correcta segregación.

Entre las actuaciones impulsadas por ese Comité cabe destacar la elaboración de trípticos informativos entregados a todo el personal de Hospital. Otra de las iniciativas ha sido la incorporación de un módulo específico de formación sobre la correcta segregación de residuos desde el Servicio de Medicina Preventiva para impartir a las nuevas contrataciones que se realicen con carácter eventual. También se ha puesto en marcha un sistema de identificación de contenedores a través de códigos de barra que facilitan el seguimiento de la adecuada utilización de los mismos.

Gestión energética sostenible

El consumo energético es otro de los retos que han llevado al centro sanitario a mejorar la eficiencia de las instalaciones manteniendo los niveles de confort. Se han establecido como objetivos prioritarios la identificación de los puntos críticos de consumo, la reducción de los mismos, la reducción del gasto en energía eléctrica y en combustibles y la utilización de energías renovables.

Para ello se ha adoptado toda una batería de medidas como es la instalación de 223,38 metros cuadrados de superficie solar con una producción diaria de 16.000 litros de agua a 50º, lo que supone un ahorro de gas natural de 18.375 metros cúbicos y 190.419 kilovatios año.

Otras medidas realizadas y que que no requieren inversión han sido el establecimiento de un Sistema de Gestión Técnica Centralizada del Edificio para llevar a cabo los cambios automáticos de temperatura según programación, la programación diaria de los climatizadores según las necesidades reales de producción así como la temporización automática de la iluminación exterior del edificio.

La instalación de toldos, la sustitución de puertas batientes por puertas automáticas, el cambio de ventanas para mejora de los cerramientos, el independizar los circuitos de alumbrado, la sustitución de lámparas instaladas por otras de bajo consumo y la instalación de lámparas de vapor de sodio en el parking, son algunas de las medidas adoptadas como inversión recuperable a corto plazo.

 
 
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