Presentado el Ecobarómetro de la Fundación Endesa que mide la Cultura Ecológica Española

La Fundación Endesa ha presentado en Madrid el estudio Ecobarómetro. Cultura ecológica y educación, elaborado con la participación de la Fundación Europea Sociedad y Educación. Este estudio se basa en dos encuestas a dos muestras de unos 1.000 individuos, representativas de la población internauta de 18 a 35 años y de la población general de 18 a 75 años, respectivamente.

 

Los resultados de la encuesta a jóvenes de 18 a 35 años, recogidos en la primera parte del informe, muestran que un 54% cree que la cantidad de contenidos dedicados a lo largo de su aprendizaje escolar (hasta los 15/16 años) al medio ambiente y la energía es muy insuficiente o insuficiente; para un 44,5% es aceptable, elevada o, incluso, excesiva. A un 30,8% le habría gustado saber más de alguna cuestión sobre esos temas porque los contenidos no se enseñaban.

La opinión de los jóvenes encuestados sugiere que hay un margen de mejora en la preparación de sus profesores para explicar esas materias y apunta a un uso no muy frecuente de metodologías ‘modernas’ en la enseñanza de temas medioambientales. Por ejemplo, el uso habitual de internet lo refiere un 11,2%; el uso de proyectos prácticos hechos en grupo o individualmente, un 10,6%; y los proyectos prácticos que implicaban a varias clases, un 2,8%. Si añadimos la categoría de frecuencia “algunas veces”, la extensión de esas metodologías sería del 33,2, 39,7 y 17%, respectivamente.

Conductas medioambientales recogidas en el estudio

Según los datos recogidos en el estudio, la mayoría de los jóvenes (un 57,7%) se siente poco o nada informada sobre temas medioambientales, una proporción que apenas ha variado en veinte años, a pesar de una mayor presencia de cuestiones medioambientales en la enseñanza y en la discusión pública.

Según el estudio, algunas conductas relevantes medioambientalmente están más asentadas que otras. Las más frecuentes son el uso de contenedores para los distintos tipos de residuos domésticos (un 87,6% la lleva a cabo habitualmente), el uso de bombillas de bajo consumo (85,3%) y separar la basura doméstica según el tipo de desecho (%). En un segundo nivel están el uso del transporte público en los trayectos cotidianos (34,3%) y la compra de productos ecológicos (27,8%). Las menos frecuentes son el dejar de utilizar el vehículo propio por razones medioambientales (17%) y la participación en acciones a favor del medio ambiente (9,6%). En general, la disposición de los encuestados a hacer sacrificios para preservar el medio ambiente es limitada.

 
 
Patrocinio Oro
Patrocinio Plata
Patrocinio Bronce
Salir de la versión móvil