Más de 1.500 millones de personas en todo el mundo se mueven cada día utilizando los equipos de transporte vertical de la multinacional Grupo Schindler. Por ello, la sostenibilidad es vital para la estrategia comercial de la compañía, que lleva un largo recorrido enfocándose en la innovación tecnológica y la mejora de la eficiencia energética de sus ascensores y escaleras mecánicas.
El análisis de ciclo de vida para mejorar el comportamiento de sus productos, el cálculo de la huella de carbono para reducir el impacto ambiental de la empresa, la innovación tecnológica, el uso de equipos de alta eficiencia energética, y un completo sistema de gestión ambiental del Grupo Schindler, forman parte de las estrategias que ayudan a la compañía a alcanzar su compromiso con el medio ambiente.
Schindler con la arquitectura sostenible
Schindler responde a la creciente demanda de estándares de construcción ecológica (como BREEAM y LEED) cumpliendo con sus requisitos y ayudando a arquitectos, desarrolladores y propietarios a obtener estas certificaciones. Para ello Schindler proporciona de forma independiente información verificada sobre los materiales, la producción, la utilización y la eliminación de sus productos a través de Declaraciones Ambientales de Producto (EPD) de acuerdo con la normativa internacional ISO 14025. Las EPD proporcionan información verificada sobre el impacto ambiental de un producto y se basan en una evaluación integral del ciclo de vida (LCA).
Toda la nueva generación de ascensores modulares (Schindler 1000, 3000, 5000) tienen las opciones disponibles para alcanzar la calificación de eficiencia energética más alta. El consumo de energía de las instalaciones individuales viene dado por la configuración, la frecuencia de uso, velocidad de desplazamiento y altura del edificio, entre otras variables.
Las soluciones de modernización y el aumento de la eficiencia energética van de la mano en Schindler. Prueba de ello son la instalación de nueva iluminación LED, unidades de recuperación de energía, sistemas inteligentes de administración de energía y sistemas de funcionamiento energéticamente eficientes que optimizan el flujo de tráfico, así como formas de aumentar la capacidad y reducir el uso de recursos.
Sistema de gestión ambiental de Schindler
El Sistema de Gestión Ambiental se asienta sobre los compromisos de su Política Ambiental, que apuesta por la mejora continua del comportamiento medioambiental, por la prevención de la contaminación y por el cumplimiento de los requisitos legales aplicables. El cumplimiento de estos compromisos es revisado anualmente a través de la Revisión del Sistema por la Dirección.
Análisis del ciclo de vida
Schindler lleva a cabo análisis del ciclo de vida (LCA) en base a las normas ISO 14040, ISO 14044 para identificar maneras de mejorar el comportamiento medioambiental de un producto durante su ciclo de vida.
Las LCA realizadas demuestran que la energía consumida por un ascensor cuando está funcionando o en stand by es responsable de dos tercios de su impacto ambiental en su ciclo de vida, de 20 o 30 años o incluso más. Por consiguiente, la fase de utilización ofrece el mayor potencial para reducir su impacto ambiental, seguida de la fase de adquisición y la fase de eliminación. Por ello Schindler se centra en reducir el consumo de energía durante la fase de utilización a la hora de diseñar el motor, el sistema de control, la iluminación de la cabina, el motor de la puerta y el sistema de ventilación. En cuanto al resto de fases, resultan menos importantes desde un punto de vista medioambiental (la fase de fabricación es responsable de menos de un 10% del impacto ambiental total de un ascensor, por ejemplo).
Innovaciones como el uso de máquinas altamente eficientes sin engranajes con máxima eficiencia mecánica y eléctrica basada en la última tecnología, la iluminación automática, el modo eco de energía, el sistema de control de destino, o la utilización de materiales no peligrosos, han permitido a Schindler mejorar la eficiencia energética de sus ascensores.
Todas las líneas nuevas de ascensores consiguen la calificación “A” de acuerdo con la ISO 25745, que evalúa la eficiencia de los ascensores.
Cálculo de la huella de carbono
Desde 2012, la compañía realiza un cálculo anual de su huella de carbono, en base a la norma UNE-ISO 14064-1 sobre los gases de efecto invernadero. Desde 2016 las emisiones de CO2, NOx, partículas y SO2 han disminuido en casi la totalidad de sus instalaciones repartidas por España y Portugal, pasando de unas emisiones totales de 2.440 t en 2016 a 1.746 t en 2018, según refleja el Informe de responsabilidad empresarial 2019 de Schindler.
Otro de los campos estratégicos de Schindler se centra en la reducción de la huella de carbono de la flota mundial de vehículos con los que operan para instalar y dar servicio a sus productos. Como su flota representa la mayor proporción de la huella de carbono, Schindler incorporó vehículos eléctricos. Además, en 2019 la compañía relanzó un programa para la optimización de su flota, incorporando soluciones de transporte, dimensionamiento adecuado de los automóviles, y otras medidas, como técnicas de conducción e incentivos para adoptar modos alternativos de transporte.
Así, en 2019, la huella de carbono de la flota mundial representó una reducción del 8,8% en la intensidad de carbono de la flota en comparación con los datos de 2017. El objetivo para el 2022 es emitir un 25% menos respecto a las emisiones de 2017.
Consumo de recursos
Según indica el último Informe de sostenibilidad de Schindler, en 2019 alrededor del 86% del volumen total de residuos fue reciclado o incinerado para recuperación de energía. Schindler clasifica en su Sistema de Gestión Ambiental dos grandes tipos de residuos: residuos no peligrosos y residuos peligrosos, siendo los más significativos los no peligrosos. Los residuos peligrosos representaron alrededor del 7% del total de residuos generados, de los cuales el 96% fue reciclado o incinerado.
Las oficinas de Schindler son dependientes al 100% de energía primaria externa, aunque siempre que es posible se incorporan equipos de alta eficiencia energética. Por ejemplo, las oficinas de Valencia emplean equipos de “free cooling” y otras oficinas de la red están conectadas a sistemas de “distric heating”, como la oficina de Barcelona. De manera general el consumo de combustible se realiza tanto para la calefacción de los diferentes centros como para la flota de vehículos.
Hitos en materia de sostenibilidad
La preocupación por el medioambiente en Schindler va más allá del diseño de sus productos (ascensores, escaleras mecánicas, piezas de recambio, etc.), incluyendo aspectos como el análisis del ciclo de vida o de la huella de carbono. El Grupo ha mejorado de manera continua el rendimiento medioambiental de sus productos y procesos. En la actualidad, Schindler está comprometido con desarrollar y aplicar tecnologías sostenibles para obtener soluciones limpias de movilidad urbana, contribuyendo con prácticas y procesos de negocio sostenibles. En línea con este compromiso, también continúa reduciendo sistemáticamente tanto su consumo de recursos naturales como la huella de carbono en las operaciones, procesos e instalaciones.
Entre sus últimos hitos alcanzados se encuentra la recuperación del 30% de la energía, revirtiendo la energía no utilizada por el ascensor a la red eléctrica del edificio. Esto repercute en una reducción de calor residual y de los requisitos de enfriamiento del ascensor.
El sistema de gestión de tráfico PORT de Schindler optimiza el flujo de tráfico en los edificios, además de ser un servicio personalizado. El 70% de las plantas de producción cuentan con la certificación ISO 14001, estándar internacional de gestión ambiental.
Los modelos de ascensor Schindler 3300, 5500 y 7000 cuentan con la clasificación A en la norma VDI 4707, una normativa alemana específica para ascensores que clasifica su rendimiento energético, siendo el «A» el sistema más eficiente.
El ascensor solar de Schindler aporta hasta un 50% de ahorro de energía al año comparado con otros modelos convencionales que utilizan energía solar o energía de la red; y las escaleras mecánicas 9300 de Schindler consumen un tercio menos de energía, disponen de velocidades ajustables, tecnología de motor ligero e iluminación LED.
Por otro lado, la compañía renueva de forma periódica los vehículos de la flota de servicio para reducir las emisiones de CO2, y en su sede central de EE.UU. han dispuesto un total de 1.200 paneles solares para reducir el consumo de energía no renovable.
Innovación y seguridad
Para minimizar los riesgos de transmisión y cumplir con toda la normativa de las autoridades sanitarias, Schindler ha desarrollado soluciones en dos ejes: la tecnología contactless y sistemas de limpieza exhaustivos.
El uso de contactless se extiende a todos sus productos con sistemas como Schindler Ahead ElevateMe, con el que se puede controlar el movimiento del ascensor de forma remota, a través de una aplicación en el móvil. En este sentido, soluciones como la tecnología Schindler MyPORT posibilitan la interacción con los ascensores a través del smartphone. Este desarrollo tecnológico se combina con Schindler PORT (Personal Occupant Requirements Terminal), un sistema que facilita la comunicación interna garantizando una gestión del tráfico más eficaz, rápida y sostenible, además de aumentar la seguridad. Se basa en la personalización de los trayectos con los que se hacen traslados más rápidos.
Además, Schindler Port es un sistema muy eficaz en el control de accesos en el edificio. A través de una base de datos ofrece información a tiempo real de los pasajeros que se encuentran en el ascensor, facilitando una evacuación rápida y controlada. En materia de eficiencia, puede trabajar en modo eco.
Otra de las soluciones para evitar el contacto físico es Schindler CleanCall, que permite a los pasajeros seleccionar su destino con un simple movimiento de la mano sin necesidad de pulsar ningún botón, así como Schindler CleanCover, una película antibacteriana que se incorpora a los ascensores para recubrir las botoneras de la cabina.
En el segundo eje, de sistemas de limpieza y seguridad, se han implantado medidas como Schindler CleanSpace, que configura los ascensores para fijar una carga máxima de hasta el 50% de ocupación. Además, cuentan con la tecnología ultravioleta, con los dispositivos Schindler UV CleanCar y Schindler Ultra UV, que utilizan las propiedades de estos rayos para la higienización de la cabina y de los pasamanos de las escaleras mecánicas, así como del sistema Schindler UV CleanAir, que purifica el aire para mantenerlo higienizado y fresco.