El rascacielos Torre Glòries de Barcelona, de 144 metros de altura y 34 pisos, ha incorporado el sistema de gestión de tránsito de personas Schindler Overlay Port con la finalidad de aumentar la capacidad de transporte de pasajeros sin aumentar el número de cabinas. Además, la tecnología Schindler Port ofrece un servicio personalizado y control de acceso.
La Torre Glòries, anteriormente Torre Agbar, es un rascacielos de la ciudad de Barcelona, ubicado en la confluencia de la avenida Diagonal y la calle Badajoz, junto a la plaza de las Glorias, y que marca la puerta de entrada al distrito tecnológico de Barcelona conocido como Distrito 22@.
A principios de 2017 Merlin Properties compró la torre Agbar por 142 millones de euros para convertirla en un inmueble multiinquilino destinado fundamentalmente a oficinas.
El edificio cuenta con 50.693 m2 de superficie, de los que 30.000 m2 corresponden a oficinas, 3.210 m2 a instalaciones técnicas, 8.132 m2 a servicios, incluyendo un auditorio y 9.312 m2 de aparcamiento. Cabe resaltar que el rascacielos cuenta con las certificaciones LEED CS Gold y BREEAM Excellent.
Sistema de gestión de tránsito de última generación
En este proyecto, Schindler debía implementar un sistema de gestión de tránsito de última generación sobre los componentes mecánicos existentes en la torre (máquina, puertas, cabinas, componentes mecánicos de hueco, etc.), aportando los siguientes beneficios: aumentar la capacidad de transporte de pasajeros manteniendo el número de cabinas; integrarse con la gestión de accesos existente en los edificios; y dotar de servicios especiales (horarios a los ascensores del edificio).
Por otro lado, la compañía necesitaba conseguir que los trabajos de modernización se llevaran a cabo inadvertidamente por los ocupantes del edificio. Para ello se desarrolló a través del Departamento TMG ( Transit Management Group ) un sistema de gestión del tránsito de personas a medida denominado Overlay Port.
Uno de los puntos fuertes de este proyecto y de su éxito ha sido la coordinación continua entre Schindler y la Dirección Técnica de Merlin Properties para afrontar la complejidad en la ejecución de los trabajos, ya que estos se han realizado con el edificio en explotación.
Tecnología Schindler Port
El uso de la tecnología Port permite establecer una comunicación sencilla y natural con cada pasajero, de tal forma que cada persona sabe inmediatamente donde ir para llegar fácilmente a su planta.
Con la tecnología Port de Schindler, el viajero solo tiene que comunicar su identidad y el destino deseado en una terminal de Port. La tecnología se encarga del resto planificando y ejecutando un viaje sin interrupciones y escogiendo la ruta óptima diseñada para completarse en el menor tiempo posible.
Asimismo, hace que el número de paradas intermedias que debe realizar cada ascensor se minimice maximizando la velocidad de cada cabina y de este modo consiguiendo una llegada más rápida al piso de destino. Por su parte, se aumenta la funcionalidad y el rendimiento, al mismo tiempo que se disminuye el consumo energético.
De esta forma, para acceder al edificio se mantiene una única tarjeta para todos los usos, ofreciendo un tráfico controlado a otros edificios. Además, los tornos de entrada pueden hacer la llamada al ascensor más adecuado para cada persona de forma automática. Así, se asigna una cabina de forma fácil y rápida que permite un tránsito fluido de personas en el lobby.
La solución alivia en los pisos la afluencia de personas al reducir el número de paradas de cada equipo y los tiempos de espera. El terminal Port permite comunicación en tiempo real sobre el tráfico con información del edificio actualizada y se adapta al perfil del usuario. Asimismo, el sistema reconoce las necesidades especiales, como un carrito de correo, y puede asignar un ascensor específico con mayor área de cabina y/o puertas más anchas.
Fases para la puesta en marcha de la actuación
La puesta en marcha de la actuación Schindler Overlay Port se hizo en varias fases. En la primera fase, el sistema Schindler Port fue conectado a las maniobras de los ascensores existentes y se instalaron la totalidad de los accesorios necesarios para su funcionamiento, incluyendo el cableado, los terminales Port e indicadores de destino. Los elementos permanecieron ocultos hasta que se informó a los ocupantes del edificio sobre el funcionamiento de tecnología Port.
La segunda fase se realizó durante los fines de semana al tener menos afluencia de personas. El sistema completo del ascensor fue cambiado por la tecnología Port, brindando una mejora inmediata a la capacidad de gestión del tráfico.
Una vez que la totalidad del grupo de ascensores funcionaba con la tecnología Port, se pudo limitar el funcionamiento de algunos de ellos de forma individual para la modernización completa de sus componentes y a la configuración de la nueva maniobra sin repercusiones significativas en el rendimiento general del grupo de ascensores. De hecho, gracias a Schindler Port, el rendimiento del tráfico durante la modernización puede resultar aún mejor que el original incluso con un ascensor fuera de grupo.
Entre las actuaciones realizadas se incluyó la instalación del cuadro de maniobra CO TX-GC II de Schindler, especialmente diseñado para edificios de gran altura como edificios de oficinas, edificios públicos y algunos hoteles. Con este cuadro, cada maniobra puede funcionar como un máster dentro de un grupo de ascensores. De este modo, el grupo seguirá funcionando normalmente si alguna maniobra individual quedara desconectada.
Gracias a estas actuaciones se redujeron los tiempos medios de espera. Además, se acortaron los tiempos de viaje en los periodos de mayor tránsito de usuarios debido a un menor número de paradas. Esto fue posible gracias a la mejor distribución de pasajeros entre cabinas. Además, se establecieron ajustes en la carga máxima de los equipos para desviar llamadas a otras cabinas y cancelar también llamadas incorrectas.
Ahorro energético del edificio
La compañía Schindler, con el uso de los convertidores PF1, consigue que una parte de la energía que se usa para mover el ascensor sea devuelta y pueda reutilizarse. De esta forma el usuario del edificio está usando la misma energía dos veces reduciendo el coste global de la factura energética del edificio.
Schindler añade en sus convertidores PF1 un módulo regenerativo para regular el flujo de energía del BUS DC a la línea de alimentación. El funcionamiento es similar a un segundo convertidor de frecuencia funcionando de forma sincronizada con la frecuencia de alimentación de línea (50 Hz en el caso de España).
La energía que normalmente se desperdiciaría en forma de calor generado en las resistencias de frenado retorna a la red, produciendo el efecto de reducir el consumo global de energía en el sistema. Este efecto es singularmente acusado cuando se usan simultáneamente máquinas altamente eficientes con motores síncronos y sin reductor.
Por último, se suman las posibilidades de conectividad y telemonitoreo que proporciona la tecnología Schindler Ahead al aplicar el Internet de las cosas y el Big Data al funcionamiento de los equipos de transporte vertical.
De esta manera, se consiguen ascensores inteligentes, capaces de proporcionar información en tiempo real a los técnicos y clientes. Analizando esta información, es posible detectar averías y reducir el tiempo de inactividad.