La IV Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FFD4), celebrada del 30 de junio al 3 de julio en Sevilla, ha reunido a líderes mundiales, organismos internacionales, el sector privado y organizaciones de la sociedad civil con el objetivo de renovar y fortalecer los mecanismos globales de financiación para el desarrollo sostenible. Entre los principales resultados de la conferencia destaca la adopción del Compromiso de Sevilla, un documento que establece nuevas iniciativas para mejorar la sostenibilidad de la deuda y la capacidad fiscal de los países en desarrollo.
El Compromiso de Sevilla tiene como principales objetivos mejorar la sostenibilidad de la deuda de los países más vulnerables, aliviar la carga financiera que enfrentan, y promover una mayor equidad en la distribución de los recursos. El documento propone una serie de medidas para lograr estos objetivos, como el establecimiento de mecanismos innovadores para la reestructuración de la deuda y el refuerzo de los sistemas fiscales en los países en desarrollo. Esto permitirá que las naciones con menos recursos puedan generar ingresos internos más efectivos y depender menos de la ayuda externa.
Plataforma Sevilla para la Acción
Uno de los aspectos clave de la conferencia fue el lanzamiento de la Plataforma de Sevilla para la Acción (SPA), un espacio de colaboración entre países, instituciones internacionales, sector privado y organizaciones de la sociedad civil para promover iniciativas innovadoras con las que avanzar en la agenda de la financiación para el desarrollo.
La plataforma ya ha recibido 130 propuestas de impacto, entre ellas varias promovidas por España, como la Alianza para las Cláusulas de Suspensión del Servicio de la Deuda, que propone suspender temporalmente los pagos de deuda de los países más vulnerables en situaciones de crisis alimentarias, sanitarias o climáticas, y el Hub Global para Canjes de Deuda, que permitirá sustituir pagos de deuda por inversiones sostenibles en infraestructuras y proyectos que favorezcan el desarrollo de largo plazo.
Casa de las Naciones Unidad en Madrid
La Conferencia también dio a conocer el Plan Sevilla para el Multilateralismo, un proyecto para transformar la arquitectura de la gobernanza global. Este plan incluye la apertura de una Casa de Naciones Unidas en Madrid, que albergará agencias de la ONU, y la intensificación de la participación de España en cumbres multilaterales.
Otro de los compromisos destacados fue el anuncio de que España alcanzará el 0,7% de su renta nacional bruta en ayuda al desarrollo para 2030, así como la creación de un mecanismo nacional que destinará 60 millones de euros anuales para el alivio de la deuda de los países en desarrollo. Además, España incrementará sus aportaciones a la cooperación en el periodo 2025-2027. En concreto, destinará 315 millones de euros en materia de salud global, 500 millones para la lucha contra el cambio climático y 725 millones en derechos humanos y acicón humanitaria.
En el ámbito ambiental, España ha anunciado su incorporación a la Global Solidarity Levies Task Force, una coalición internacional destinada a explorar nuevas fórmulas para que el sector del transporte aéreo, incluidos los jets privados y los billetes premium, contribuyan a la transición ecológica justa mediante la imposición de nuevas tasas.