El proyecto Hibiscus se centra en el desarrollo y la demostración de cinco nuevos materiales de construcción de origen biológico para impermeabilización, aislamiento y carpintería. Estos materiales contendrán hasta un 80% de componentes de origen biológico y mejorarán su rendimiento ambiental en un 25%. Para lograrlo, el proyecto utilizará materias primas de origen biológico, como aceite de cocina usado, resina de pino, carbohidratos y lignina, así como flujos de productos reciclados.
Liderado por SOPREMA, el proyecto cuenta con 12 socios de seis países europeos, entre ellos tres entidades españolas: Leitat, Indresmat SL y Cellmat Technologies SL. Con una duración de cuatro años, el presupuesto total asciende a 9.173.874,14 euros, de los cuales la Unión Europea contribuye con 7.497.302,50 euros.
Materiales de construcción de origen biológico
La puesta en marcha oficial del proyecto tuvo lugar los días 4 y 5 de septiembre en Estrasburgo (Francia), en las instalaciones de Soprema. En esta reunión fundacional, los socios revisaron las actividades previstas y establecieron la metodología de seguimiento del proyecto.
La iniciativa prevé crear cinco materiales de construcción de origen biológico: dos soluciones de impermeabilización, dos de aislamiento y una para carpintería. Estos materiales contendrán en promedio un 80% de componentes de origen biológico, ofreciendo al mismo tiempo mayor durabilidad, resistencia al moho y protección contra incendios.
El proyecto prevé impactos significativos: una reducción del 25% en emisiones de CO₂ y un ahorro energético del 20% respecto a materiales fósiles convencionales. Además, se espera alcanzar una cuota del 10% en el mercado europeo de materiales biológicos para la construcción en los próximos cinco años, generar 200 nuevos empleos y lograr ingresos anuales de 50 millones de euros para 2039.
Hibiscus también contribuirá a fortalecer las economías locales mediante el uso de materias primas de la Unión Europea, reduciendo la dependencia de importaciones. Se proyecta que sus soluciones se implementen en 10.000 edificios, lo que podría disminuir las emisiones totales en un 40% y el consumo de combustibles fósiles en un 15%.