El nuevo director general de Agenda Urbana y Arquitectura, Iñaqui Carnicero, pone de manifiesto en esta entrevista el papel de la rehabilitación, la edificación y la regeneración urbana en el contexto de la recuperación económica y como eje transformador hacia ciudades más sostenibles. Carnicero nos habla de las actuales líneas de trabajo del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), desglosando los puntos más relevantes de la Estrategia a largo plazo para la rehabilitación energética en el sector de la edificación en España (ERESEE 2020), la nueva Ley de Arquitectura y Calidad del Entorno Construido, el Programa de Promoción y Difusión de la Arquitectura, así como la evolución y la importancia de los Edificios de Consumo de Energía Casi Nulo para alcanzar la descarbonización del parque edificado.
CONSTRUIBLE: En el contexto actual de recuperación de la actividad económica en el que nos encontramos, ¿cuál debe ser el papel de la edificación? ¿Qué líneas de trabajo generales se van a impulsar desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en esta nueva etapa de reactivación y hacia la descarbonización del parque edificado?
Iñaqui Carnicero: La edificación siempre ha sido uno de los pilares fundamentales de la economía española. Al cierre de 2019, la construcción representaba casi un 6% del PIB nacional (alcanzando el 16,3% si consideramos también la actividad inmobiliaria), y en términos de empleo, antes de la pandemia, empleaba a más 1,3 millones de trabajadores. Si bien estos datos demuestran la importancia del sector, su enorme potencial determina el papel transcendental que debe jugar en la etapa de reactivación de la economía que ahora se inicia. El Pacto Verde Europeo pone de manifiesto la necesidad de duplicar las tasas medias de rehabilitación edificatoria que se producen en Europa para alcanzar los retos en materia de energía y clima planteados en la Unión, y eso supone para España la necesidad de rehabilitar un importante número de edificios (la ERESEE prevé, en línea con el PNIEC, rehabilitar energéticamente 1,2 millones de viviendas de 2021 a 2030), y además hacerlo de forma profunda para conseguir edificios de alta eficiencia energética que permitan alcanzar los objetivos de descarbonización en 2050.
Por ello, desde el Ministerio estamos trabajando en un Plan de Rehabilitación y Regeneración urbana que dinamice la rehabilitación, que dé forma a los planteamientos de la Estrategia a largo plazo para la rehabilitación energética en el sector de la edificación en España, dando respuesta no solo a las necesidades energéticas, sino que responda de forma integral a las necesidades de los ciudadanos en términos de seguridad, habitabilidad y accesibilidad, y que no se quede solo en el ámbito del edificio, sino que posibilite la regeneración de nuestras ciudades, en línea con los objetivos definidos en la Agenda Urbana Española.
CONSTRUIBLE: Recientemente el Mitma ha remitido a la Comisión Europea la nueva actualización de la ‘Estrategia a largo plazo para la rehabilitación energética en el sector de la edificación en España’, ERESEE 2020. ¿Qué nuevas medidas contempla esta estrategia respecto a las anteriores en términos de sostenibilidad y eficiencia energética? ¿Cuáles son los puntos clave de esta hoja de ruta para la rehabilitación del parque edificado, la regeneración urbana y la descarbonización del sector en 2050?
Iñaqui Carnicero: Como es bien sabido, la Directiva (UE) 2018/844, no solo trasladó al ámbito de la Directiva 2010/31/UE de eficiencia energética de edificios las estrategias de rehabilitación a largo plazo del parque edificado que debían presentar los EEMM, sino que incrementó de forma considerable las cuestiones que debían ser abordadas en las mismas. La nueva ERESEE 2020 plantea no solo un conjunto de escenarios para alcanzar los objetivos de ahorro energético planteados en el PNIEC para este sector, sino que presenta una hoja de ruta que permita la descarbonización del parque en 2050, planteando hitos intermedios.
En la Estrategia se desarrolla un importante paquete de medidas, necesarias para la consecución de los objetivos, estructuradas en los siguientes ejes de acción: Impulso de la coordinación sectorial, desarrollo normativo y medidas administrativas a favor de la rehabilitación energética, rehabilitación de los edificios de las administraciones públicas y otras medidas ejemplarizantes, financiación pública, fomento y movilización de la financiación privada, lucha contra la pobreza energética, despliegue de un nuevo modelo energético en el sector de la edificación y modernización del sector de la rehabilitación.
El objetivo a 2050 es reducir en 36,6% el consumo de energía final del sector de la edificación en 2050 respecto al consumo actual, pasando de los 304.276 GWh actuales (67% corresponden al sector residencial y el 33% restante al sector terciario) a 192.728 GWh en 2050, y que el consumo de energía procedente de fuentes fósiles, que se sitúa actualmente en torno a los 126.211 GWh (72.448 GWh en el sector residencial y 53.763 GWh en el sector terciario), se reduzca a prácticamente cero en 2050.
CONSTRUIBLE: Desde el Ministerio también se está trabajando en la nueva Ley de Arquitectura y Calidad del Entorno Construido, que se encuentra en periodo de consulta pública hasta finales de julio 2020. ¿Qué puntos contendrá esta normativa a nivel de arquitectura sostenible, rehabilitación y renovación urbana, y qué cambios va a suponer a corto y medio plazo para nuestro entorno edificado y nuestras ciudades?
Iñaqui Carnicero: La crisis sanitaria nos ha hecho cuestionarnos nuestras formas de vivir, trabajar y de relacionarnos con los demás y ha puesto en valor, más si cabe, la necesidad de dotar a nuestros ciudadanos de espacios de calidad en que poder desarrollar sus actividades y relacionarse de forma segura. En este sentido, los arquitectos deben jugar un papel fundamental en esta transformación que está demandando la sociedad, a través de propuestas que mejoren el entorno donde vivimos tanto desde la escala doméstica como desde el ámbito urbano y de territorio.
Es decir, la calidad del entorno construido no se garantiza por el simple hecho de cumplir con la normativa existente. No se trata tan solo de garantizar la construcción de edificios que desde el punto de vista técnico sean capaces de perdurar en el tiempo como simples objetos inconexos, sino de visibilizar y cuidar las relaciones de afección que se establecen en cuanto a escala, materialidad y vinculación con lo existente y que afecta tan directamente a las relaciones sociales y calidad de vida de los ciudadanos.
La arquitectura, puede y debe dar respuesta a muchos de los interrogantes que se han abierto en el contexto actual, y potenciar la calidad arquitectónica y la sostenibilidad de las actuaciones en los procedimientos de contratación pública, ejerciendo la Administración un papel ejemplarizante. La futura Ley, que se encuentra actualmente en consulta pública previa, dará respuesta a esta necesidad de garantizar la arquitectura y la calidad del entorno construido como bien de interés general con el objetivo de preservar, difundir y fomentar su calidad, como elementos clave para la mejora de las condiciones de vida de las personas. Esta ley, conjuntamente con el resto de las iniciativas que se desarrollan en el Ministerio, desde la Agenda Urbana Española hasta el desarrollo reglamentario en el ámbito de la edificación, pasando por las políticas de ayudas, pretenden dar respuesta de forma integrada al gran reto de avanzar hacia una economía descarbonizada en 2050, desde el ámbito de la arquitectura. En definitiva, se pretende facilitar el impulso de la rehabilitación y renovación urbana, mejorando la eficiencia energética, la accesibilidad, la habitabilidad y la adaptación a las nuevas formas de vida y de trabajo del parque construido existente, incrementando su calidad y capacidad de dar la respuesta adecuada a nuestras necesidades actuales.
CONSTRUIBLE: Respecto a la gestión de residuos de construcción y demolición, reciclaje y reutilización de materiales, uso de materiales más sostenibles para la construcción de edificios y gestión eficiente del agua, ¿contemplará el Código Técnico de la Edificación en sus futuras actualizaciones alguna estrategia específica que impulse, mediante la economía circular, una edificación más respetuosa con el medio ambiente que tenga en cuenta estas cuestiones?
Iñaqui Carnicero: Con el Código Técnico de la Edificación se pretende dar respuesta a las necesidades y demandas sociales, individuales y colectivas, y es evidente que dentro de esas necesidades actuales está la de una edificación más sostenible. Desde que se aprobó el CTE, en el año 2006, muchos son los cambios que se han producido en todos los ámbitos y por ello resulta necesaria una actualización profunda del CTE que dé una respuesta amplia al cambio climático que se está produciendo, incrementando las medidas orientadas a mitigarlo, e incluyendo medidas de adaptación a una nueva situación que no debe soslayarse. Es muy importante que la reglamentación se plantee teniendo en cuenta el ciclo de vida completo del edificio. Los esfuerzos realizados para disminuir los consumos energéticos derivados del uso de los edificios deben ampliarse al resto de fases, limitando también la energía embebida en los materiales, los consumos de recursos naturales durante la construcción, entre ellos los recursos hídricos tan importantes en un país como el nuestro, o la generación de residuos. Es necesario plantear las exigencias reglamentarias sobre la base del análisis de ciclo de vida e incluir los principios de la economía circular favoreciendo la reutilización de materiales, garantizando las condiciones de seguridad y habitabilidad de nuestros edificios. También nos parece necesario articular medidas que nos lleven hacia unas ciudades y edificios más resilientes.
En cualquier caso, al margen de las modificaciones que se introduzcan en el marco reglamentario, es necesario generar una mayor conciencia social sobre la necesidad de evolucionar hacia una arquitectura más sostenible, y es por ello por lo que, como comentaba en la pregunta anterior, se ha iniciado ya la consulta pública previa a la redacción del anteproyecto de Ley de Arquitectura y Calidad del Entorno Construido que permitirá tener un enfoque integrado en la materia. Tal y como reclama la Agenda Urbana Española, la utilización racional del suelo y del patrimonio urbano y arquitectónico, debe estar precedida de los valores que claman ya por un desarrollo urbano sostenible en su triple dimensión social, económica y medioambiental.
CONSTRUIBLE: Durante su intervención en la jornada de presentación del VII Congreso Edificios Energía Casi Nula, destacó el Programa de Promoción y Difusión de la Arquitectura, con el que se pretende potenciar y proyectar la arquitectura española a nivel nacional e internacional. Además, uno de los objetivos del Ministerio es también fomentar el valor de la arquitectura entre los ciudadanos. ¿En qué consiste este programa exactamente y qué tipo de resultados se espera obtener?
Iñaqui Carnicero: La participación de la ciudadanía es fundamental en este proceso de transformación hacia unas ciudades más sostenibles, y para que esa participación sea efectiva resulta fundamental que la ciudadanía comprenda e interiorice los valores de la arquitectura y empiece a demandar su calidad y la del entorno construido como un derecho para el desarrollo social y el bienestar. La arquitectura es una herramienta clave para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos y por ello, la difusión de la arquitectura y sus valores cobran un papel trascendental en nuestra política. Pero este proceso no debe ser unidireccional, sino integrador, por lo que queremos generar instrumentos que permitan el debate y la reflexión en torno a la arquitectura, como herramienta de diplomacia cultural, que permita conectar y acercar personas de distintas sensibilidades y desarrollar procedimientos que permitan la participación e integración de profesionales y ciudadanos en una auténtica Casa de la Arquitectura en la se pueda producir esta interrelación.
También queremos potenciar aquellas iniciativas que se han demostrado importantes en esta labor de promoción y difusión de la arquitectura como las bienales, española e iberoamericana, pero incidiendo más en el acercamiento al ciudadano y fomentando su participación activa.
Por último, es importante destacar la enorme calidad de nuestra arquitectura, auténtico referente a nivel internacional, por lo que seguiremos trabajando en todas aquellas iniciativas que permitan difundirla y ponerla en valor, prestando especial atención a los jóvenes arquitectos, que tanto pueden aportar a este proceso de transformación social que vivimos.
CONSTRUIBLE: El próximo 5 de noviembre Grupo Tecma Red y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana -a través de la Dirección General de Agenda Urbana y Arquitectura- celebrarán en Madrid el VII Congreso Edificios Energía Casi Nula, que tiene como lema ‘La descarbonización de la edificación, una palanca para reactivar el sector: obra nueva y rehabilitación’. Teniendo en cuenta el recorrido de la celebración del Congreso EECN desde 2012, ¿qué ha aportado al Mitma la colaboración durante estos años? ¿Qué puede aportar esta nueva edición a los asistentes? ¿Por qué es imprescindible la asistencia al evento en el momento actual?
Iñaqui Carnicero: La colaboración con el Congreso de Edificios de Energía Casi Nula ha sido uno de los elementos más importantes para conseguir la transformación de nuestra regulación en materia energética en edificación, con la participación de todos los sectores. El Congreso, en sus sucesivas ediciones, ha permitido ir avanzando en el conocimiento y plantear las opciones más óptimas para afrontar el reto de la descarbonización del sector. En el mismo, se han podido compartir experiencias, valorar resultados y reflexionar sobre las estrategias a implementar. Todo ello ha permitido que la reflexión de los profesionales y el desarrollo reglamentario hayan caminado en paralelo, nutriéndose mutuamente. En el Ministerio tenemos la sensación de que la nueva normativa energética es en gran medida fruto de esa labor conjunta de todos, que ha sido favorecida por la existencia del Congreso.
Pero si bien es cierto que el Congreso ha sido muy importante para el Ministerio, no lo ha sido menos para los asistentes que han encontrado ese lugar común donde compartir experiencias y buscar soluciones conjuntamente a los grandes retos que nos plantea el cambio climático.
Aunque el nombre del Congreso y la aprobación del nuevo Documento Básico DB HE de ahorro de energía, que incluye la definición reglamentaria de Edificio de Consumo de Energía Casi Nulo, pudiera hacernos pensar que la tarea ha terminado y plantearnos qué interés puede tener el Congreso en este contexto, nada más lejos de la realidad. El concepto de EECN incluido por primera vez en la Directiva 2010/31/UE, era uno de los primeros pasos hacia la descarbonización del sector en 2050, y en el horizonte quedan todavía muchas preguntas por resolver para alcanzar ese ambicioso, pero absolutamente necesario objetivo, y el Congreso debe seguir jugando un papel activo en todo este proceso. Por ello, querría terminar esta entrevista agradeciendo a Grupo Tecma Red la gran labor desarrollada, así como a todos los patrocinadores y asistentes, sin los cuales esta iniciativa no hubiera tenido el impacto que ha tenido. Y un reconocimiento especial al Comité Técnico que con su trabajo ha sabido en todo momento orientar los debates hacia aquellos puntos que requerían mayor reflexión.